sábado, 25 de agosto de 2012

Lo que pienso y no digo

Últimamente he aprendido que decir lo que se piensa no siempre es lo políticamente correcto. Así que, sin personalizar, para todos aquellos que alguna vez me han abordado o hablado de las siguientes maneras, va lo que realmente pienso:
  • "Hola, soy un Dom experimentado, tengo más de ___ años de experiencia en el BDSM y te solicito (exijo) que me trates de 'Señor'". Mi respuesta suele ser algo del tipo "el protocolo tiene para mí un fuerte significado, por eso reservo su uso a personas con quienes he construido lazos o relaciones en donde tenga cabida para ambos." Lo que pienso y no digo es "si ud. es un imbécil caballero inseguro que necesita que lo señoreen hasta las desconocidas para sentirse mejor, no es mi problema".
  • "No eres una verdadera/buena sumisa." Esa es campeona. Por lo general mi respuesta es "bueno". Lo que pienso y no digo es: "Prefieres negar tu incapacidad de lograr que te obedeciera o me comportara como tú lo deseas y responsabilizarme a mí. Me parece bien, yo no soy la que necesita que otros me reafirmen y, por lo tanto, tu opinión me resbala."
  • "¿Qué tan sumisa eres?". Mi respuesta depende de mi estado de ánimo y varía entre "Poco con quien tiene que hacer esa pregunta.", "Soy sumisa al 73.58%", "Soy sumisa nivel 14 según la Academia Mundial del BDSM" (esta última se la copié a una amiga). Lo que pienso y no digo es "si piensas que la obediencia depende sólo de la sumisa y que el Amo no tiene que hacer ningún trabajo, eres un flojazo."
  • "Hola, ¿te gusta que te claven duro?". Mi respuesta es un simple "no". Lo que pienso y no digo es "si todas las neuronas las tienes en la verga, no me tomaré el trabajo de entablar contigo una conversación".


  • "¿Eres sumisa en todo?/¿Haces todo lo que te pidan?". Mi respuesta también varía dependiendo del ánimo, puede ser "no", o "sí, claro, si me piden que robe un banco o que vaya y cace un panda, arranco enseguida". Lo que pienso y no digo es "¡siguienteeeee!".
  • "Preséntate". Esa me enoja de entrada, así que cuento hasta 10 y digo algo como "no entiendo", "soy nueva", "no manejo el protocolo" si estoy de MUY buen ánimo. En su defecto, simplemente ese personaje pasa a la lista de ignorados. Lo que pienso y no digo es: "¿¿¡¡En serio??!! ud. me aborda, está desesperado por tener sumisa, la ley de oferta y demanda me favorece, hay al menos media docena más de tipos hablándome por la misma razón y ¿¿¿ud realmente cree que YO me tengo que presentar para que ud. me evalúe??? Si ud. es un pelmazo individuo que no es capaz de relacionarse con una sumisa como persona, no gastaré mi tiempo." Antes del rol somos personas, yo no trato con Doms o con sumis, yo trato con personas.
  • "¿Te gusta que te peguen y te traten mal?". Mi respuesta suele ser corta, un simple "no", para no decir lo que realmente pienso: "De verdad ¿¿fue tan poco su esfuerzo de mirar en google que eso fue lo único que vio??".
  • "Zorra, llegó tu Amo". A esta usualmente no respondo y lo paso directamente al 'ignore'. Lo que pienso y no digo es: "Además de pajero, perezoso, y seguramente mal polvo."
  • "Hola. ¿Cuáles son tus límites?". Esta pregunta, si ya hemos hablado un poco, si se ha construido, al menos, una cierta confianza, algunas pocas líneas de acercamiento, me parece apenas lógica. Sin embargo, si es la segunda línea después de un saludo, no termina de cuadrarme. Por lo general, respondo cualquier cosa y de ahí en adelante me vuelvo monosilábica, mientras pienso: "pajero, aunque bedesemero, sigue siendo pajero".
De nuevo, soy una persona antes que un rol. Espero relacionarme con una persona antes que con un rol. Si eso no es posible, si no puedes verme como persona, te aseguro que jamás me verás como sumisa.

1 comentario:

  1. hola muy buen escrito me parece que la tienes clara mas que algunos y algunas

    interesante

    ResponderEliminar